Great Expectations

Cual novela de Dickens o peli de Cuarón , o sea, con "grandes expectativas" , hoy parto mi aventura tuerca al Gran Premio de Brasil, y no es que espere tomarme una foto con Montoya, o que Mc Laren haga el 1-2...En realidad eso SI espero (Kimi -Juan Pi) . Tampoco que me resulte el vudú que le tengo a Alonso en un matchbox , o que los botones del hotel sean como Alexandre Pires, no. Mis grandes esperanzas son porque lo que pase será distinto y por eso bienvenido. A ver que pasa...

Ciudad con aroma de café

Es una de las cosas que me gusta de acá. A pesar de todo lo fome que puede resultar Concepción en muchos aspectos , los cafés no decepcionan . Son tantos y nunca están vacíos . A cualquier hora del día podemos ver un puñado de penquistas de nacimiento o "nacionalizados" degustando desde el clásico cortado de mina hasta el masculino goteado, pasando por mi favorito, el espresso que no dudo en pedir "bien negro, bien caliente". Mañana, tarde y noche, en verano y en un invierno tan rebelde como este los cafés marcan el pulso de mi curiosa ciudad. Y eso que no incluyo a los con el aditivo "piernas". No, esos no son mi fuerte, sino los tradicionales, desde los gigantes como L'Angolo hasta los de esquina de galería bajo una escalera, o como en el que actualmente me encuentro y al que entro por primera vez. Se llama "Armonía" y es un café esencialmente de mujeres , básicamente porque ante todo es un café esotérico como tantos otros antes que él.

Como indicaba en el post anterior la Fundación está en temporada de tarot y en estos momentos estoy acompañando a mi amiga Rosi a verse las cartas con la Érika. En este preciso momento le están develando su destino, mientras propietaria y empleadas se encuentran en la mesa de mi lado tomando onces y haciendo un arito, hablando de ropa en liquidación, gotas para bajar de peso y ex maridos. Típico. Está bien piola y nice el lugar. Presumo que toda la clientela es habitué del lugar y de la Érika , claro, y que fue o está a punto de ser tarotizada. Rossana suena de fondo y además se venden diversos artículos, tipo bazar. No puedo evitar sentir nostalgia al disinguir un frasco lleno de calugones Kegoll, los mismos que consumía con adicción en mis recreos de la Escuela España en las postrimerías de los '80s. Tampoco faltan los artículos kitsch y made in Korea. Si hasta me dan ganas de tener uno yo, que aunque no reconozco en mi ni pizca del gen comerciante, no niego que simplemente amo el olor a café. Digamos que si tuviera dinero y Starbucks funcionara con franquicias , no me resultaría una mala idea.

A lo Lawrence de Arabia

En el clásico de 1962 dirigido por David Lean, "Lawrence of Arabia" con Peter O'Toole y un insuperablemente sexy Omar Sharif, una vez más se explica el concepto islámico de "maktub", algo así como "está escrito", y que quiere decir que todo ya está determinado en el libro de la vida de cada uno por el mismo Alá. Sin embargo, y por gracia del mismo , no todos los hombres tendrían un destino escrito, habiendo algunos como el propio Lawrence, soldado inglés apasionado del desierto y por extensión de Arabia , capaz según sus camaradas de ruta, de escribir su propio libro.

Recordé a Lawrence, por supuesto GUARDANDO LAS DIFERENCIAS, ahora que mis coleguis están en temporada de tarot, y es que alguna adivina ha sido más que asertiva con algunas amigas y eso de que tal o cual "bruja" le dijo lo que iba a pasar, incluso habiendo un registro escrito de la predicción , ya me resulta a más que mito urbano. El punto es que suelo encontrarme con historias de tarot tan asombrosas que hubo un tiempo en que también las frecuenté y anoté predicciones que finalmente jamás se concretaron , y es que conmigo nunca resulta y debo limitarme a ser testigo de las caras de asombro de mis semejantes . He pensado que , como me dijo una de las primeras que visité, de que lo que me pasaba no era fruto de procesos, sino que sólo ocurría repentinamente, llegué incluso a creer que nunca me iba a pasar nada (lo que se llama NADA), pero ahora he decidido pensar que soy como Lawrence y que Alá ha dejado mi bitácora en blanco, quizás no para una vida de Best Seller, pero sí para ser escrita con mi propia letra, y que eso del "maktub" se lo dejaré a Cohelo y su alquimista.

Yo, Rhett Butler

Elquenodebesernombrado me decía que había dos tipos de mujeres: las Lisas Hayes y las Lynn Minmey. En este entendido él claro sería un Rick Hunter de ocasión y señalaba que las Lisas siempre se enamoraban de los Ricks y éstos siempre terminaban enamorados de las Minmey. Convengamos en que según él yo era una Lisa... Dios! ese era un buen momento para YO salir corriendo. Anyway, dijo Ross Geller, yo le respondía que para mi habían dos tipos de hombres: Los Rhett Butler y los Ashley Wilkes, teniéndome a mi como una Scarlett O'Hara contemporanea y de tercer mundo, y que claro, las Scarlett siempre se enamoraban de los Ashley Wilkes , aquellos seres impávidos, impasibles, incapaces de demostrar sus sentimientos , en desmedro-aparente- de los Rhett Buttler , capaces de gritar su amor, aunque de manera poco confiable, por decir lo menos y a los cuales se les valoraba cuando ya era demasiado tarde y a ellos les importaba "un comino".

Pues bien, dándole una vuelta de tuerca al asunto , media obsesiva, como siempre, caigo en la cuenta que en materia de relaciones no soy una Scarlett (ni una Lisa), sino toda una Rhett Butler, amando de modo tan suis generis pero no por eso menos verdadero, no siendo romántica , pero haciendo que las cosas pasen , cumpliendo cada capricho de mi Scarlett de ocasión , pero no por eso alejándome de mis "primos", dejandome tentar por la diversión sureña, pero capaz de librar a mi sujeto de amor del más catastrófico incendio para a salvo dejarlo a merced de los yanquis , y volver una vez más, y otra, y otra, hasta que claro, de tanto ir el cántaro al agua me termine importanto un comino... No se si ellos pensarán que mañana será otro día.

Nota: Para entender este post se requiere haber aprobado "Cultura Pop 1"

(De sobra sabes que eres la primera que no miento si juro que daría por ti la vida entera , por ti la vida entera, y sin embargo un rato cada día ya ves, te engañaría con cualquiera, te cambiaría por cualquiera...)