Una tarde con la Micaela

Me la encontré el lunes en los chinos , mientras almorzaba con la Andrea. Me dijo que se había estado acordando harto de mi y que me tenía en pendiente, así que así, sin más , quedamos de juntarnos al otro día pa ir a tomarnos algo por ahí. Nos citamos en el Teatro Concepción justo a la hora en que media ciudad se juntaba a ver "Mi mejor enemigo" en los martes cinematográficos y le pedí que me acompañara a Falabella a lo de mi asunto (ver el siguiente post) y de ahí partimos al Barrio Estación a tomarnos tres piscos y amaretos sour. Hablamos de su casa, de mi viaje, confesamos la mutua envidia, llamamos a Rodrigo y la rayamos finita recordando a los amores liceanos que nunca fueron, eso debido a que me dio por preguntarle por el origen del "Manual", aquel libro fundacional que guía las vidas sexo-afectivas de mis amigos en cuestión, fuente de tantos consejos que me han sido entregados por Rodrigo , como aquel de antología: "Piensa como rubia".

Llegué como a las 11.30 a la casa, mi mamá por supuesto al borde de la hipnosis viendo "La Granja", me acosté para recordar, justo antes de dormirme que mañana (hoy) es el cumpleaños de JM, el Señor Eucaliptus.